Este domingo 28 de abril, las candidatas Claudia Sheinbaum de la coalición “Sigamos Haciendo Historia”, Xóchitl Gálvez de la alianza “Fuerza y Corazón por México”, y el candidato Jorge Álvarez Máynez de Movimiento Ciudadano, se enfrentaron en su segundo debate presidencial, el cual estuvo marcado por acusaciones de corrupción y propuestas económicas.
El debate tuvo lugar en los estudios Churubusco, donde decenas de simpatizantes se congregaron para presenciar el enfrentamiento entre los aspirantes a la Presidencia de México. Moderado por los periodistas Alejandro Cacho y Adriana Pérez Cañedo, el evento abordó temas como economía, empleo, inflación, pobreza, desigualdad, cambio climático y desarrollo sustentable.
A pesar de las fallas en la transmisión del debate, los televidentes pudieron presenciar los ataques entre las candidatas Xóchitl Gálvez y Claudia Sheinbaum desde el inicio del evento. Mientras Gálvez llamaba a su rival “la candidata de las mentiras” y «narcocandidata», Sheinbaum se refirió a su contrincante como “la corrupta” y “candidata del PRIAN”.
Durante sus intervenciones, Gálvez destacó la extorsión y el cobro de piso como principales problemas a abordar, acusando a Morena de ser un “narcopartido”. Entre sus propuestas económicas, mencionó la creación de créditos para emprendimiento, condonación de impuestos y críticas al Fondo de Pensiones del Bienestar.
Por su parte, Sheinbaum defendió la administración actual y prometió dar continuidad a los programas implementados durante el gobierno de López Obrador. Propuso la creación de viviendas, inversión pública y aumento del salario mínimo.
Uno de los momentos más destacados del debate fue cuando Xóchitl Gálvez sacó una botella de agua contaminada, invitando a Sheinbaum a darle un «traguito», en referencia a las problemáticas del suministro de agua en algunas zonas de la Ciudad de México.