El juez Juan Merchan anunció que el juicio penal contra el expresidente Donald Trump que estaba programado para este lunes, se moverá para el 15 de abril y abordará 34 delitos relacionados con los pagos irregulares a una actriz porno en 2016.
Trump, que se presentó en persona a la audiencia vestido de traje azul y corbata roja, volvió a denunciar a la prensa que estos juicios son una «caza de brujas» por parte de los demócratas.
El expresidente, quien será el primero en enfrentar un juicio penal en la historia del país, afirmó que este caso está siendo utilizado para interferir en el proceso electoral. Aseguró que este juicio podría haberse presentado hace tres años y medio, pero que se ha pospuesto para perjudicar su capacidad de hacer campaña.
El equipo de defensa de Trump intentó retrasar aún más el juicio, argumentando que la Fiscalía de Manhattan había infringido normas en la selección de pruebas.
En paralelo, este mismo lunes, un tribunal de apelaciones de Nueva York autorizó al expresidente a pagar una fianza menor de 175 millones de dólares en un caso de fraude civil, mientras se resuelve la apelación por la sentencia que le obliga a pagar 454 millones de dólares.
Este nuevo giro representa un importante alivio para Trump, quien enfrenta cargos por inflar fraudulentamente el valor de sus activos junto con algunos de sus hijos y su empresa.