Después de 7 horas de discusión y entre advertencias de que será impugnado, los senadores de Morena y sus aliados aprobaron en lo general y particular la segunda parte del “plan B” de reforma electoral del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Si bien éstas no suplen al INE por otro organismo como proponían en la reforma constitucional de López Obrador, sí modifican la integración del INE, establece la reducción de salarios de los consejeros así como la eliminación de fideicomisos y la destitución del actual secretario ejecutivo, Edmundo Jacobo Molina.